Nuestro Fundador


“La paz no es solamente la ausencia de la guerra;

mientras haya pobreza, racismo, discriminación y exclusión

difícilmente podremos alcanzar un mundo de paz.”

Rigoberta Menchú, Nobel de la Paz 1992


CÉSAR ALÁN GUEVARA EVARISTO

Nació en Xochimilco, Ciudad de México el 10 de julio de 1987. Hijo de Francisco Guevara y Lourdes Evaristo, originarios de la tierra sementera de flores, de origen humilde y abuelos chinamperos.

Egresado del Estudio Técnico Especializado de Fotógrafo Laboratorista y Prensa de la UNAM, ha buscado documentar y visibilizar la desigualdad en nuestro país desde el año 2006.

A la edad de 19 años y con recurso propio decide emprender una campaña de alfabetización en la Sierra Mixteca de Oaxaca, misma que rendiría frutos y que en cada verano se repetiría en comunidades Zapotecas durante toda su juventud.

Realizó sus estudios de Filosofía en la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM, donde egreso en el 2010.

César Alán, desde temprana edad, al vivir la falta de respuesta de las autoridades ante la necesidad de servicios básicos en comunidades en extrema pobreza, donde menores de 3 años, fallecían por falta de atención médica a orillas de la Ciudad, fue el caso de Ingrid Itzel de ocho meses y de su primo, que fallecieron unas horas más tarde del Día de Reyes del 2015, apenas unas horas antes los había visitado César con un grupo de jóvenes para regalarles ropa abrigadora y juguetes, sin embargo, “murieron de pobreza” por negligencia médica; Este fue el parteaguas, donde alzó la voz y comenzó su trabajo por mejorar la calidad de vida de la gente pobre y que por su humilde origen es violentada en sus Derechos, principalmente por aquellos que ni el gobierno, ni los programas sociales, ni las organizaciones no gubernamentales ponían su mirada en esa porción de miseria paradójicamente llamada “El Paraíso”.

En mayo de 2015 funda un centro de atención para niños y jóvenes con discapacidad, asesoría y acompañamiento legal a mujeres violentadas y de atención a indígenas residentes en la Ciudad de México, acompañado por programas de alfabetización.

Por lo que en 2019 logra constituir legalmente la Asociación Civil que llevará por nombre Petit Fils y que busca revalorizar el trabajo del campo en la ciudad, crear programas de atención para que niños, niñas, adolescentes y jóvenes de zonas pobres, en riesgo de calle, discapacidad y escasos recursos económicos, para que accedan a mejores oportunidades, brindando: Asistencia y acompañamiento jurídico, con un énfasis en el Apoyo para el desarrollo de los indígenas y hermanos mexicanos que han migrado a la CDMX desde sus pueblos de origen en búsqueda de una mejor calidad de vida. Su apoyo en la defensa y promoción de los Derechos Humanos le ha valido la Mención honorifica a la Labor Social en Contexto de la Emergencia Sanitaria por COVID–19 por parte de la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México, donde de la mano de cientos de mujeres y decenas de jóvenes voluntarios abrió un comedor popular en Xochimilco y alrededor del cual se ha creado comunidad, al repartir alimento y dar atención psicológica, información sobre medidas de prevención de contagios y apoyo a cientos de estudiantes brindando herramientas tecnológicas para evitar la deserción escolar.

De esta manera ha emprendido acciones y programas que promueven el fortalecimiento del tejido social y la seguridad ciudadana logrando una aprobación en la comunidad y sus alrededores, gracias a la visión permanente de una sociedad justa, equitativa y de bienestar, con programas que buscan revalorizar y defender los Derechos Humanos de cada Ciudadano.

Su activismo y defensa de los desprotegidos, se amplía en favor de las comunidades indígenas y en contra de la violencia contra la mujer. La mayor parte de su vida, la ha dedicado a luchar para dar voz a los que no la tienen y exigir justicia por los que ya no pueden hacerlo. El trabajo a favor de los pobres y la Defensa de los Derechos radica en la experiencia propia vivida en comunidades, personas violentadas y discriminadas por sus orígenes, esta empatía es la que lo vuelve uno con los pobres, dedicado desde su adolescencia a poder conocer, empatizar y luchar por las comunidades vulnerables, en los estados de Oaxaca, Zacatecas, Aguascalientes y en la misma Ciudad de México.

En su compromiso con el trabajo arduo que realiza día con día ha logrado especializarse en Discapacidad en la Primera Infancia; Aprendizaje en los Adultos y Promotor del Desarrollo Infantil.

Actualmente y desde la Dirección General y Operativa de Petit Fils, ha trabajado por cumplir los objetivos de la agenda 2030, luchando contra el hambre, la pobreza y las desigualdades, operando el comedor Comunitario, mismo que se origina en junio de 2020, en uno de los picos mas fuertes de la pandemia por COVID-19 y que sigue en funcionamiento, gracias a su trabajo de transparencia y legalidad, atendiendo a mas de 150 personas diarias, brindando de esta manera un plato de comida, que es un signo de solidaridad, esperanza y lucha mano a mano con la comunidad. Dicho trabajo ha permitido su colaboración de la mano de investigadores de La Universidad de Sussex, Reino Unido, sobre las respuestas comunitarias a la inseguridad alimentaria y las redes de cuidado en medio de entornos alimentarios no saludables. Así como de campañas de concientización de la vacunación y prevención de contagios ante COVID-19 de mano de la Dra. Marina Escalera, investigadora de la Universidad de Oxford, Inglaterra.

Desde el inicio ha focalizado parte primordial del trabajo en lograr alianzas con sectores empresariales y educativos de nivel público y privado, dando como resultado convenios con distintas escuelas de nivel medio superior y superior, buscando involucrar y consientizar a los jóvenes en el trabajo Social en las comunidades, desarrollando la formación práctica y ocupacional; Dentro de los distintos grupos de Vinculación, César preside el Comité del Colegio Nacional de Educación Profesional Técnica (CONALEP) Milpa Alta CDMX, desde donde se caracteriza por buscar en los alumnos una formación integral, creando de Petit Fils una casa de puertas abiertas.